Las habilidades blandas se están convirtiendo en un imperativo para el negocio, ya que los trabajos rutinarios continúan perdiendo relevancia a medida que la naturaleza del trabajo se transforma.
Las habilidades blandas son una poderosa herramienta para fortalecer las relaciones y gestionar el cambio. Al mismo tiempo, los empleados y las organizaciones deben reconocer la necesidad de ejercer y controlar estas habilidades – para usarlas con prudencia y moderación.